Recorriste con tus dedos
las líneas de mi mano
viajaste por mi palma
trepaste por mi brazo
mientras prometías futuro
llegaste hasta mi hombro
y te deslizaste por mi cuello
cual pluma animada
por suaves vientos tibios
subiste hasta mi cara
y atravesando una planicie
arribaste a la cuenca sediento
de mis ojos húmedos
y apoyándote sobre ellos
me robaste tu imagen
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario